lunes, 16 de abril de 2012




Eran dos nubes blancas, blancas como la nieve, que viajaban
por el cielo azul de una mañana de primavera.
Y se sentían felices de ser tan blancas y como de algodón.
Se acercaban, se alejaban, reían, se perseguían y dibujaban
extrañas formas en el cielo.
Por la tarde, en cambio, cuando el sol se iba poniendo, se
volvían de color rosa y amarillo, rojo y morado.
Eran preciosas aquellas dos nubes al atardecer.
Un día de mucho viento se fundieron la una con la otra.
Y se añadieron también muchas otras nubes que acabaron
formando una masa gris y espesa.

miércoles, 14 de marzo de 2012

LAS DOS NUBES AMIGAS





Eran dos nubes blancas, blancas como la nieve, que viajaban
por el cielo azul de una mañana de primavera.
Y se sentían felices de ser tan blancas y como de algodón.
Se acercaban, se alejaban, reían, se perseguían y dibujaban
extrañas formas en el cielo.
Por la tarde, en cambio, cuando el sol se iba poniendo, se
volvían de color rosa y amarillo, rojo y morado.
Eran preciosas aquellas dos nubes al atardecer.
Un día de mucho viento se fundieron la una con la otra.
Y se añadieron también muchas otras nubes que acabaron
formando una masa gris y espesa.
Y comenzó a llover con mucha fuerza.
Cuando paró la lluvia, el cielo quedó más azul que nunca y
no se veía ni una nube por ninguna parte.
Pero resulta que un charco que apareció en el suelo se puso a
hablar y a reír con otro charco que había a su lado.
Y le dijo:
-¿Te acuerdas de cuando éramos nubes?